Comer sano, fresco y delicioso, un buen estilo de vida para que vivamos felices y saludables.
 

 

PLATOS MULTICOLORES Y RICOS EN SABORES

Al incluir frutas y verduras en nuestra alimentación diaria le damos gusto al paladar y salud a nuestro cuerpo. Un estilo de vida muy saludable que podemos complementar con actividad física regular y buenas prácticas de autocuidado.

Disfrutar de una deliciosa comida es uno de los placeres que más felicidad nos producen, un momento mágico cuando además incluimos verduras y frutas en nuestra alimentación diaria; sus colores cautivan nuestra vista, los sabores encantan el paladar y sus vitaminas y nutrientes nos proporcionan la energía necesaria para disfrutar de muchas actividades con vitalidad. Un buen hábito es contabilizar 6 porciones entre frutas y verduras al día.

Trucos, fáciles, sencillos y saludables

En el desayuno : incluyamos por ejemplo, alimentos como champiñones, espinacas o acelgas en la preparación de los huevos revueltos. Si nuestro estilo está más orientado a los cereales, mezclemos una porción de frutas. Un sánduche con dos buenas rebanadas de tomate sabe mejor y un buen vaso de jugo natural es un complemento ideal para iniciar el día. ¡En la variedad está el placer!

En la media mañana : recarguemos ánimos y energías consumiendo nuestra fruta favorita, para el sitio de trabajo o estudio se puede llevar picada o entera dependiendo del gusto y la comodidad. Recuerda que las frutas enteras siempre debemos lavarlas.

En el almuerzo: los platos con ensaladas tienen mejor apariencia y son más nutritivos. Si llevamos el almuerzo preparado desde la casa al colegio, la universidad o el trabajo, lo mejor es empacar la ensalada en un recipiente aparte y preferir aquellas de larga duración. Los menús saludables de los restaurantes empresariales siempre son abundantes en verduras. Una buena práctica es pedir que nos sirvan los aderezos y salsas por separado, así controlaremos un consumo adecuado de este tipo de alimentos.

Algo o medias tardes: una fruta o un jugo natural para evitar la fatiga.

Cena o comida: una buena composición de alimentos debe incluir más verduras y hortalizas, por ejemplo lechuga, zanahoria, brócoli y menos arroz y pastas. Otra alternativa es una ensalada que contenga una porción moderada de carnes.

Merienda: quienes nos vamos a dormir tarde, entre la hora de la cena y el tiempo de dormir, podemos tomar otra porción pequeña de frutas.

Claves para tener en cuenta

• Consumir mínimo 3 comidas al día.

• Tomar entre 6 y 8 vasos de agua diarios.

• Incluir al menos 6 porciones de frutas y verduras frescas al día.

• Agragar poca sal y azúcar a las comidas.

• Moderar el consumo de bebidas alcohólicas.


 

Aprovechemos las cosechas de cada una de las frutas y verduras para encontrarlas más frescas y de paso ayudar con la economía del hogar. Además nos permitirá variar los platos en el transcurso del año.

Vivir la vida libre como el viento, espérelo en nuestra próxima nota.

Esta nota fue elaborada con la asesoría de Juan Alberto Toro García, Coordinador Nacional de Auditoría en Medicina Laboral de la EPS Sura.

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